Luego de peticiones y demandas para que se restablezca la DIECA (Dirección de Educación Ambiental y Comunitaria), el Ministerio de Educación ha establecido dos Unidades separadas (una de Educación Comunitaria, y otra de educación Ambiental) en diferentes Direcciones. Estas Unidades tienen un menor rango que la anterior DIECA. La Unidad de Educación Ambiental está ahora dentro de la Dirección de Educación Básica Regular y tiene un carácter secundario sin poder de decisión: "Unidad funcional no orgánica" .
La educación ambiental no se restringe a la Básica Regular, sino que debe abarcar todas la modalidades, ya que todas las personas, no solo los niños y adolescentes, deben formarse en enfoque y conciencia ambiental para ser capaces de hacer frente a la grave crisis ambiental y civilizatoria que vivimos.
Lo ambiental está hoy en el centro de la agenda del desarrollo y por tanto debe estar en el centro de la agenda educativa. Desde la economía se plantea que la crisis civilizatoria obedece a un modelo socio económico determinado, que corresponde a una fase del capitalismo irracional y depredadora, que funciona en torno al lucro y la ganancia insaciables. La crisis ambiental es la expresión más grave de la crisis del modelo económico. Se trata, obviamente de dos lados de una misma medalla. La dimensión económica es la causa y la dimensión ambiental su más fatal consecuencia.
La educación ambiental posee un potencial de resiliencia y emancipación porque conduce directamente a un debate cultural porque coloca en cuestión un modo de vivir destruyendo la vida y abre la posibilidad de refundar un nuevo orden que genere equilibrios de vida, que garantice la reproducción de las condiciones de vida. Lo nuevo es “Ir hacia la reproducción ampliada de la vida en sustitución de la reproducción ampliada del capital” .
Lo ambiental no es un tema más. Constituye el desafío del siglo y requiere de estrategias integrales para afrontarlo que incluyan metas, recursos, herramientas, responsables y rendición de cuentas. Si la educación coloca el tema en última prioridad, los estudiantes construirán representaciones sin sentido crítico, lo que favorece la adaptación al modelo en crisis.
Siendo saludable que se haya escuchado la demanda y se haya creado una instancia que se ocupe de la dimensión ambiental, ya que con el nuevo reglamento, había desaparecido totalmente, hay que ir más a fondo y darle poder, prioridad y recursos a esta dimensión. No es un tema adjetivo ni puede estar a cargo de una instancia subsidiaria. Constituye una dimensión sustancial en los procesos formativos y de construcción de ciudadanía. Lamentablemente hoy la educación ambiental sigue siendo subalterna en la mirada de las autoridades. Lo esencial es invisible a los ojos.
En contraste, el enfoque ambiental es central en la mirada y en la práctica de escuelas y maestros. Existen hoy 20,000 escuelas (cerca de la tercera parte de las escuelas del país) que son ya escuelas ambientales, y que gracias a ello han transformado el conjunto de su institucionalidad. Escuelas abiertas al entorno, que han roto la rigidez de las aulas y están ligadas a las comunidades, que rescatan la cultura de los pueblos y su respeto por la Pachamama, que conocen y valorizan la diversidad de sus cuencas, donde los estudiantes aprenden de manera activa y divertida. Este movimiento no cesará porque va al ritmo de la historia. Lástima que la institucionalidad del sector educación no camine en ese mismo ritmo y dirección.
Logros Ambientales 2013, dieca
Reproducimos a propósito de este tema un artículo aparecido en el Diario UNO y llamamos a suscribir la petición de reincorporación de la Dirección de educación Ambiental y Comunitaria: https://www.change.org/p/ministro-de-educacion-jaime-saavedra-chanduvi-lima-per%C3%BA-restituir-a-la-direccion-de-educacion-ambiental-en-el-rof-del-ministerio-de-educacion?recruiter=57002506&utm_source=share_petition&utm_medium=facebook&utm_campaign=share_facebook_responsive&utm_term=des-lg-share_petition-no_msg&fb_ref=Default
Absurdo luego de la COP
Por Teresa Tovar Samanez Diario UNO el marzo 2, 2015
Está en curso una petición al Ministro de Educación para que no se elimine la Dirección de Educación Comunitaria y Ambiental (DIECA). La institucionalidad debe responder a los desafíos centrales del país y no al revés (Carlos Franco). Es claro que uno de esos desafíos es el ambiental. No es un tema transversal más sino el tema del siglo y, por tanto, exige alta prioridad, institucionalidad que se haga responsable y recursos protegidos.
Pese a que está establecida una Política Nacional de Educación Ambiental, esta queda descolocada, sin interlocutores ni responsables en el Ministerio de Educación quien, paradójicamente, es su ente rector. Es absurdo que esto ocurra luego de la COP y del Congreso Iberoamericano de Educación Ambiental de los que el Perú fue sede. Lorena Aguilar (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) sostuvo en ponencia central(Foro sobre género y cambio climático, feb.2015) que solo cuando hay alguien que toma la responsabilidad, las cosas resultan.
No es posible que con una mano y en un minuto se borre lo que con la otra se construyó durante casi veinte años. Es también una falta hacia a los maestros de las 20 mil escuelas que hoy trabajan la educación ambiental con fuerza, convicción e institucionalidad:
“La educación ambiental es una política prioritaria del colegio. Es lo central. Busca vivir en armonía: entre los agentes educativos y el medio ambiente” (Andamarca, Ayacucho)
“Es la formación de la conciencia ambiental la que permite a la población identificarse con los problemas ambientales, comprender cómo se produce el impacto de la acción humana sobre la naturaleza y viceversa. Con la educación ambiental tenemos la enorme satisfacción de contribuir a la mejora de una vida mejor y saludable”(Callao).
“La educación ambiental contribuye a valorar y cuidar la riqueza natural y cultural del país: la biodiversidad y la cosmovisión andina. Esta zona tiene mucha riqueza natural y cultural, unen las costumbres con el valor que le dan a la naturaleza” (Andamarca, Ayacucho)
“Cultura ambiental es la capacidad de actuar respetando el medio natural y hacer una costumbre ese respeto por el ambiente. Es la capacidad de pensar que estamos obligados a cuidar el único lugar que tenemos para vivir, y actuar de acuerdo a ello”(Pucallpa)
"La incorporación del enfoque ambiental implica trabajar con la comunidad, tener en cuenta la problemática y potencialidades ambientales de la escuela y de su entorno local” (Palpa, Ica)
Personalidades importantes han firmado la petición formal de restitución de la DIECA. Mencionamos dos: I.Lanegra, exviceministro de Interculturalidad: “Desaparece la DIECA del Ministerio de Educación. Es un retroceso en la educación ambiental”; C.Vildoso, exministra de la Mujer: “El ROF del Ministerio de Educación es un asunto que atañe a la ciudadanía. Tiene que ver con la educación y sociedad que queremos”.
Es urgente que las autoridades recobren el sentido común y enmienden tan enorme despropósito.